Científicos detectan en la corona solar ondas magnéticas torsionales, largamente hipotetizadas, con el Telescopio Solar Inouye de la NSF, lo que apunta a un motor oculto que impulsa fenómenos solares clave.
Utilizando el Telescopio Solar Inouye de la NSF, los científicos han descubierto pequeñas “manchas en forma de cinta” dentro de las erupciones solares, lo que ofrece nuevas pistas sobre cómo estas poderosas erupciones liberan energía y afectan a la Tierra.
El Telescopio Solar Daniel K. Inouye de la Fundación Nacional de Ciencias de Estados Unidos (NSF por sus siglas en inglés) capturó las imágenes más nítidas jamás obtenidas de una llamarada solar, revelando hebras oscuras de bucles coronales con un detalle sin precedentes.
En un innovador nuevo estudio, un equipo dirigido por científicos del Observatorio Solar Nacional (NSO por sus siglas en inglés) de la Fundación Nacional de Ciencias de EE.UU. (NSF) ha capturado la imagen más nítida hasta la fecha de la superficie del Sol, revelando “franjas” magnéticas ultrafinas, conocidas como estrías, de solo 20 kilómetros de ancho, aproximadamente la longitud de Manhattan.
Científicos del Observatorio Solar Nacional de la Fundación Nacional de Ciencias de EE.UU. y del Instituto de Tecnología de Nueva Jersey obtuvieron las mejores imágenes de la corona solar hasta la fecha.
El Telescopio Solar Daniel K. Inouye de la Fundación Nacional de Ciencias de EE.UU., el telescopio solar más poderoso del mundo, operado por el Observatorio Solar Nacional (NSO) de la NSF cerca de la cima del Haleakalā de Maui, alcanzó un hito importante: la primera luz de su instrumento más avanzado el Filtro Sintonizable Visible (VTF, por sus siglas en inglés).
Durante la última década, los científicos han confirmado la presencia de un tipo importante de ondas magnetizadas, llamadas ondas de Alfvén, en la atmósfera exterior del Sol, es decir, la corona. Estas ondas, específicas de ambientes plasmáticos como los del Sol, pueden transportar energía desde la atmósfera inferior hacia la caliente corona y el viento solar.
Hanna Rose Shell es la primera artista en residencia del Observatorio Nacional Solar (NSO por sus siglas en inglés), durante un año sabático apoyado por la Universidad de Colorado.
Crédito: NSO/AURA/NSF Noviembre, 2024 La actividad de las llamaradas en una región solar activa conocida como NOAA 11861 (imagen superior) ha proporcionado una gran cantidad de datos, arrojando nueva luz sobre el comportamiento del H₂ en la atmósfera inferior del Sol, o fotósfera. Las observaciones FUV de IRIS han revelado un rico espectro de líneas […]
A pesar de su importancia, la detección oportuna de filamentos solares y sus propiedades magnéticas, como la quiralidad o la lateralidad, sigue siendo un desafío.